El pensamiento de Dios
Lectura semanal
«Así que la fe es por el oír, y el oir, por la palabra de Dios». Romanos 10:17
Acerca del Espíritu Santo
02/08/2025
SU PRESENTACIÓN ADMIRABLE
“Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador… el Espíritu de Verdad». El Consolador, que es el mismo Espíritu de Verdad, y que a su vez es el mismo Espíritu Santo (14:26), proviene de Dios el Padre, y es dado solo a aquellos que sigamos a Cristo Jesús en plena obediencia, porque la Verdad del Espíritu, es Cristo Jesús: “Yo soy la Verdad” (Juan 14:6).
“Otro Consolador” (“Otro igual a mí”). Jesús afirma que el Espíritu Santo es igual a él. Y si Jesús es igual al Padre (Juan 14:9), y el Espíritu Santo es igual a Jesús, porque tiene la misma función divina de consolar de manera sobrenatural, entonces el Espíritu Santo es igual al Padre. De hecho, el Espíritu Santo proviene del Padre (Juan 15:26b). Por lo tanto, y definitivamente, los tres son Uno.
“Otro Consolador”. Al afirmar Jesús que el Espíritu Santo es igual a él, en términos de divina funcionalidad (“Otro igual a mí”), Jesús nos hace caer en cuenta que la divina consolación que el Espíritu Santo provee, es igual a la que él ministró en los apóstoles. Porque después de su horrenda caída edénica, todo ser humano requiere con angustiosa urgencia esa consolación que solo Dios puede proveerle. Pues el ser humano solo halla el vital consuelo en su ser, cuando por el Espíritu Santo, recibe en Cristo el perdón, la salvación, el equilibrio del alma, la fortaleza del espíritu y la inspiración y dirección espiritual, para transitar por el único camino perfecto y gozoso que demanda su alma. En el idioma original del Nuevo Testamento que es el griego, el Espíritu Santo es enunciado con el término “Parakletos”, que se traduce como “Consolador”, y que a su vez significa, Abogado o perfecto Ayudante, el cual resuelve de manera siempre acertada todos los casos que se le confían. El Espíritu Santo, entonces, es el ayudante idóneo del Padre, de los creyentes y de la iglesia, para el fiel cumplimiento de los portentosos y sobrenaturales propósitos de Dios Padre en la tierra.
¿En busca de un recordatorio diario?